"Logos"
Juan 1:1-4 - En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. 2 Este era en el principio con Dios. 3 Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. 4 En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres.
Como lectores y hacedores de las Sagradas Escrituras, es interesante admirar los estilos literarios y la terminología utilizada en tales escritos. Son diversas las ocasiones donde al leer una porción y tratar de escudriñar, nos topamos con palabras que pueden ser utilizadas fuera de lo usual y porciones que quizás podamos pensar que significan algo diferente a lo intencionado, o mayor aun, hay ocasiones donde ciertas palabras no nos hacen sentido al observarlas tras un lente moderno y no uno bíblico y cultural. Como recordatorio para tal enseñanza, la Escritura fue redactada mayormente en el Hebreo/Arameo (AT) y en el Griego Koiné (NT). Las traducciones modernas que hoy utilizamos en nuestras lenguas natales, pueden utilizar palabras un poco distantes de las originalmente intencionadas por los autores bíblicos. Casos como los tales, requieren que profundicemos y utilicemos recursos que nos ayuden a estudiar los términos bíblicos en su lenguaje y contexto original, para así poder apreciar y aplicar a nuestras vidas el destello de bendición que estos pueden contener. Quizás muchos pueden preguntar, ¿por qué Dios permitiría que las traducciones fueran realizadas de esta manera? Siempre comento que a Dios le plació que así fuera, para así también sembrar en nosotros una razón para tener que ir más allá y no tan solo leer, sino escudriñar. Si fuera muy fácil entender la Escritura, nadie procurará estudiarla, pero al toparnos con tales escenarios, esto permite al Discípulo navegar por aguas profundas donde solo aquellos dispuestos a ir más allá podrán descubrir los tesoros brindados por la misma. La Escritura no solamente es Gloriosa por su Contenido (Mensaje), también es Hermosa por su Estilo (Redacción).
Es interesante notar la gloria y armonía de los Evangelios Sinópticos, pues cada uno presenta un mismo Protagonista y Mensaje, el cual es Cristo, pero todos lo hacen con un estilo diferente y con Gloria Celestial, pero también Armonía Literaria. Sin embargo, el escrito de Juan siempre enciende una intensa llama en mi corazón, pues tal escrito contiene tanta profundidad que nunca ceso de nadar en sus olas. Al dirigir su escrito a la Iglesia, el Espíritu lo inspiró a redactar de tal manera que él dejó suficientes profundidades para que todo lector siempre tuviera algo aprender y alguna ola por navegar. Con tan solo comenzar su primer capítulo, ya nos chocamos con una gran sorpresa que nos sumerge en un estudio de largas horas. Juan decide comenzar su escrito introduciendo a Dios como aquel Verbo que no solo era con Dios, sino aquel Verbo que era Dios mismo. Es interesante notar como los otros evangelios deciden hablar de Cristo ya sea desde Su nacimiento, o desde Su Genealogía. Estos logran no solo introducir a Cristo, sino también conectarlo con el Antiguo Testamento, esto es debido a que cada historia del AT siempre busca apuntar hacia Cristo, ya sea con profecía, sombras, tipologías, Cristo siempre dice presente en el AT. Pero Juan, no decide solo conectar a Cristo con el AT, sino que Juan enfatiza un atributo de Dios aun mas grande, pues no lo limita al nacimiento físico, sino que nos recuerda que en el Principio, ya Dios era, pues si Dios es el Autor, ya Dios existía, no tiene principio, nada lo limita o lo precede. Esto nos hace recordar que Dios es el Autor de la Fe mencionada en Hebreos, pero también la Raíz y Fuente de nuestra existencia y nuestra vida. Juan decide remontarnos en una viaje no hacia la creación, sino hacia el Creador el cual al ser Eterno, Juan nos da un preámbulo de Su Eternidad. Es importante Conocer el Principio de la Humanidad (Génesis), pero también es necesario Admirar la Eternidad del Creador. Juan también sabía que antes de explicar a Cristo, y apuntar hacia donde vamos en Él, él también debía aclarar de dónde venimos. Pues muchas veces es necesario saber de dónde venimos, para entender hacia dónde vamos. Es necesario entender que fuimos creados del polvo de la tierra, para también entender que nuestra futura morada es celestial, no terrenal, somos peregrinos en la tierra, no somos residentes de la misma. De igual manera, para entender lo que Dios hará, tenemos que entender lo que Dios ya hizo.
Es también necesario escudriñar la terminología utilizada por Juan en tal capítulo. Al leer el termino “El Verbo”, quizas podamos rapidamente intentar definirlo bajo nuestra lengua actual, lo que nos llevaria mas bien a una definición basada en “accion, movimiento”, pero si tal fuera el caso, entonces Juan nos estaría diciendo que en el principio era la acción, el movimiento, y tal era con Dios, y Dios mismo era la acción. Esto le daría un significado muy limitado, reduciendo a Dios a una cosa, y no a alguien. Esto nos impulsa a definir el término en su contexto original, lo cual nos lleva al término en el Griego Koiné conocido como “Logos”. “Logos” significa Palabra, por lo tanto, hace referencia a una Palabra la cual requiere una previa existencia y en muchos casos cumplimiento. Es como si Juan entonces quisiera decir, en el Principio fue la Palabra, y esa Palabra era con Dios, y era Dios. Juan está diciendo, todo lo que surgió en el AT y lo que surgirá en el NT, es Jesus mismo obrando, Jesus es el cumplimiento de la Palabra y lo profetizado en el AT, pero Jesus también es la misma Palabra cumplida. Aquí también vemos una conexión a la ocasión donde El se identifica como aquella Verdad, mostrando parte de sus atributos y Su esencia tras la personificación. Jesus (Dios) no es acción o movimiento, El produce acción y movimiento, pues el mismo es la Fuente del movimiento donde aún sin nosotros existir, ya Su Espíritu se movía sobre las aguas. Jesus es el Cumplimiento de lo Profetizado en el Ayer, pero también el Protagonista de lo que aún está por Venir.
Al utilizar el término “Logos”, Juan puede conectar ambos testamentos, conectar a Jesus con el ayer, el presente, el mañana, y también la eternidad. También podemos recordar como Dios mismo es quien no solo ha brindado Su Palabra hacia nosotros, sino que Él mismo la ha cumplido, y Él mismo nos ha llevado a entenderla y caminar en ella. Solo el Autor de dicha Palabra, puede DIRIGIRNOS hacia Sus Tesoros, más solo el Recipiente de dicha Palabra, puede RECIBIR tales Tesoros y caminar agarrado de manos con el Autor.
“Logos” nos habla sobre la Eternidad del Creador, pero también el Privilegio de la Creación. Un Dios Todopoderoso y Eterno no nos necesitaba, más aún así, nos creó, nos amó, y nos da la esperanza de un día poder no solo Caminar con Él, sino Vivir con Él.
“Logos” no es solo un CUMPLIMIENTO de ALGO Escrito o Dicho, es también una ESPERANZA de que ALGUIEN Volverá!
"“Logos” no es solo un CUMPLIMIENTO de ALGO Escrito o Dicho, es también una ESPERANZA de que ALGUIEN Volverá"
Autor: Jorge Colón
theoreihub@gmail.com
11.20.2024