The Hands that Mend the Brokenhearted

“The Lord is close to the brokenhearted and saves those who are crushed in spirit.”

Psalm 34:18

Have you ever experienced a pain so deep that wraps you so tightly almost like a serpent squeezing the life out of its prey gasping for air with no escape? I am sure many of you will raise your hand in agreement. You are not alone. Even Jesus went through a moment of despair as He was on the cross: “And about the ninth hour Jesus cried out with a loud voice, saying, “Eli, Eli, lama sabachthani?” that is, “My God, My God, why have You forsaken Me?” Matthew 27:46

Think about it – Jesus being the son of God had a moment where He felt abandoned by God. Most of us envision God as someone who is unreachable. Someone who doesn’t understand what we go through. Someone who has favorites and only worries about a selective group of people. Feeling despaired and forgotten by God is normal. Many of us go through it but the important part is not to wallow in despair. These dark moments are the best moments where you can see God in a more intimate and personal way. Let’s take Job for example – this man was minding his own business when all the sudden many tragedies came knocking at his door where he lost it all including his family. He is known for his unwavering faith but there was a moment where Job questioned God. Like I said earlier, these moments of confusion where you find yourself questioning God is normal. It is ok to go through the emotions. It is ok to feel while you are in the process but there will be a point where complete surrender is required. An acceptance of God’s will above ours. God confronted Job’s inquiries with “Where were you when I laid the foundations of the earth? Tell Me, if you have understanding.”(Job 38:4) God listed everything that He did without the help of humanity. God was basically reminding Job of His sovereignty. Sometimes God allows things to happen so we can see that He is sovereign and there is nothing that is above Him.

Once Job accepted the sovereignty of God that is when he was able to enter a more intimate and personal relationship with God. Job knew of God but didn’t know God intimately until he experienced these dark moments. “I have heard of You by the hearing of the ear, but now my eye sees You.” (Job 42:5). These dark moments drew Job closer to God. I know its easier said than done but one thing I urge you to do is surrender your broken heart to the Hands of the only one who has the capability to mend it in a perfect way. Just as Job saw God in the midst of darkness – You too will get to see God through your circumstances.

“He heals the brokenhearted and binds up their wounds.”

Psalm 147:3

"El Señor está cerca de los quebrantados de corazón y salva a los que están abatidos en espíritu".

Salmos 34:18

¿Alguna vez has experimentado un dolor tan profundo que te envuelve con tanta fuerza, casi como una serpiente que exprime la vida de su presa, sin aire y sin escapatoria? Estoy seguro de que muchos de ustedes levantarán la mano en acuerdo. No estás solo. Incluso Jesús pasó por un momento de soledad mientras que estaba en la cruz: "Y como a la hora novena, Jesús clamó a gran voz, diciendo: Elí, Elí, ¿lama sabactani?", es decir: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado? Mateo 27:46

Piénsalo: Jesús, siendo el hijo de Dios, tuvo un momento en el que se sintió abandonado por Dios el Padre. La mayoría de nosotros visualizamos a Dios como alguien que es inalcanzable. Alguien que no entiende por lo que pasamos. Alguien que tiene favoritos y solo se preocupa por un grupo selecto de personas. Sentirse desesperado y olvidado por Dios es normal. Muchos de nosotros pasamos por eso, pero lo importante es no mantenernos en ese dolor. Estos momentos oscuros son los mejores momentos en los que puedes ver a Dios de una manera más íntima y personal. Tomemos a Job por ejemplo: este hombre de repente le vino muchas tragedias tocando a su puerta, donde lo perdió todo, incluyendo su familia. Este hombre es conocido por tener un fe inquebrantable, pero hubo un momento en el que Job cuestionó a Dios. Como dije antes, estos momentos de confusión en los que te encuentras cuestionando a Dios son normales. Está bien pasar por las emociones. Está bien sentir mientras estás en el proceso, pero habrá un punto en el que se requerirá una entrega completa. Una aceptación de que la voluntad de Dios va por encima de la nuestra. Dios confrontó a Job diciendo "¿Dónde estabas tú cuando yo fundaba la tierra? Dime, si tienes entendimiento. (Job 38:4.) Dios enumeró todo lo que hizo sin la ayuda de la humanidad. Básicamente, Dios le estaba recordando a Job su soberanía. A veces Dios permite que las cosas sucedan para que podamos ver que Él es soberano y que no hay nada ni nadie que esté por encima de Él.

Una vez que Job aceptó la soberanía de Dios, fue cuando pudo entrar en una relación más íntima y personal con Dios. Job conocía de Dios, pero no lo conocía intimamente hasta que experimentó estos momentos oscuros. " De oídas te había oído; Mas ahora mis ojos te ven.” (Job 42:5). Estos momentos oscuros que acercaron Job a Dios. Sé que es más fácil decirlo que hacerlo, pero una cosa que les insto a que hagan es depositar su corazón quebrantado en las manos del único que tiene la capacidad de restaurarlo de una manera perfecta. Así como Job vio a Dios en medio de la oscuridad, tú también podrás ver a Dios a través de tus circunstancias.

"Él sana a los quebrantados de corazón y venda sus heridas".

Salmos 147:3